“No debemos engañarnos afirmando que se trata de una tarea fácil. En cada encrucijada histórica siempre están los que optan por el mal menor, por la seguridad mediocre, por el camino del medio, que no lleva a ningún lado. Pero también están presentes quienes no se resignan a sufrir la historia, sino que están dispuestos a crearla. Son los que convierten en posible lo imposible, son los que logran demostrar que, en ciertas circunstancias, resignarse equivale a traicionar” .ii (Seregni, 1971)