El Congreso del Pueblo
12 de agosto de 1965
PROGRAMA DE SOLUCIONES
“12 (agosto de 1965). Se inicia auspiciado por la CNT, el Congreso del Pueblo. 707 organizaciones de fábrica o barrios; de pueblos o departamentos; sindicatos, cooperativas, estudiantiles, profesionales, docentes, de trabajadores rurales y jubilados, participan, representados por 1.376 delegados.
De esas organizaciones, destacamos, además de los sindicatos integrantes de la CNT, la Confederación General Reivindicativa de las Clases Pasivas; la FEUU (Federación de Estudiantes Universitarios del Uruguay), el Sindicato Médico, la Asociación Odontológica, la Federación de Cooperativas de Producción, la Unidad Cooperaria Nº 1, el Consejo de Iglesias Evangélicas, la Asociación de Empleados Civiles de la Nación, El Movimiento Nacional en Defensa del Petróleo y el Movimiento Nacional de Inquilinos.
Se crean seis comisiones (…) El programa (incluye): reforma agraria, reforma industrial, que asegure el pleno empleo, y el (fomento de las) inversiones); ;reforma del comercio exterior (de acuerdo al interés nacional), aumento de las inversiones públicas (nacionalizaciones); reforma tributaria (impuesto a la renta personal y al patrimonio); reforma crediticia y bancaria; plan de viviendas; reforma y coordinación del transporte (que sirva al desarrollo agropecuario, industrial y comercial); fomento de las cooperativas de producción y de consumo; (…) soluciones al régimen de seguridad social, a los problemas de la educación; respeto a los derechos y libertades publicas, y, por soberanía nacional (…)” (“Los años duros. Cronología documentada (1964-1973)”, Martha Machado Ferrer, Carlos Fagúndez Ramos, MonteSexto, 1987)
El Congreso del Pueblo. Nacimiento de la Central (C.N.T.)
En abril de 1959 la Comisión Coordinadora –creada en 1956-, llamó a una reunión con el carácter de “asamblea consultiva de sindicatos”, la cual se realizó el mismo mes de abril; luego de otras dos reuniones en 1959 (agosto y octubre), se realizó el “Congreso de Unificación Sindical”, el cual inició sus sesiones el 9 de diciembre de 1959, con la intención de constituir una “central única”; luego de sucesivos cuartos intermedios que se prolongan hasta junio de 1961, culmina con la creación de la “Central de Trabajadores del Uruguay” (CTU), no “única” en la medida que los propios sindicatos que participaban de ella entienden que no pueden prescindir de otras organizaciones que habían decidido no integrarla.
El Congreso, en abril de 1960 realiza un llamamiento a todas las fuerzas populares y a los poderes públicos para enfrentar la política del FMI.En mayo de 1964 los gremios textil, gráfico y de Funsa, acordaron con la CTU la convocatoria de una Convención Nacional de Trabajadores.
En setiembre de 1964 se reúne la Convención y decide:
· Convertirse en un órgano coordinador de la CTU con todos los sindicatos.
· Convocar a una jornada de protesta con un paro general nacional para el 6 de abril de 1965, precedida de grandes asambleas en las que se discutieran los puntos de la propuesta programática aprobada por la Convención. Llamar a otras fuerzas sociales para participar en dicha jornada.
· Convocar para agosto de 1965 un Congreso del Pueblo, donde participaran organizaciones de los sectores populares: estudiantes, profesionales, cooperativas agropecuarias, iglesias, etc.
· Discutir la propuesta programática de la Convención Nacional de Trabajadores y formular un programa que fuera representativo de todos los sectores populares, y no sólo de los trabajadores.
El Congreso del Pueblo se realizó precedido del paro de abril; concurrieron a él casi 1.100 delegados representando a más de 700 organizaciones sociales.
En octubre de 1966 se reunió el Congreso de Unificación Sindical, mediante el cual la CNT dejó de ser la Coordinadora de Sindicatos para convertirse en la central de los trabajadores uruguayos.
Dicho Congreso dotó a la CNT de un Estatuto, una Declaración de Principios, un Programa, una dirección, y de un funcionamiento democrático de sus congresos.
La Declaración de Principios reafirmó el carácter autónomo del movimiento obrero, vinculó la lucha nacional con la unidad latinoamericana, antiimperialista y reafirmó también la fraternidad y solidaridad internacional de todos los trabajadores.
El Programa proponía una serie de medidas tendientes, no sólo a superar la crisis sino a desarrollar económica, social y políticamente el país; reforma agraria e industrial, nacionalización de los monopolios y del comercio exterior, reforma de la política de inversiones públicas, reforma tributaria, crediticia y bancaria, reforma de la seguridad social, de la educación y de la cultura.
Este proceso de los trabajadores uruguayos recogía una rica tradición histórica: desde comienzos del siglo XX los trabajadores y sus distintas organizaciones sindicales habían bregado por la unidad de todos: 1966 fue el año de la concreción.
También dicho proceso de unidad fue solidificado en medio de conflictos y luchas; entre el final de la década de 1950 y 1965 se desarrollaron conflictos muy largos en la industria, en los organismos públicos y en las empresas rurales, que obligaron a las distintas organizaciones públicas y en las empresas rurales, que obligaron a las distintas organizaciones sindicales a desplegar una energía muy grande, y provocaron la solidaridad del conjunto de los trabajadores: luchas por derechos sindicales, seguros de enfermedad y otros beneficios sociales, por la tierra y contra la desocupación, contra la congelación de salarios, etc. Entes autónomos (UTE y otros en 1959), textiles (1960), tabacaleros (de1960 a 1961), metalúrgicos de TEM (1961) y Aluruguay (1962), frigoríficos (1962 y 1963), bancarios, funcionarios municipales, de la Administración Central y Descentralizada del Estado (1963, 1964 y 1965), personal de Lanasur (1964 y 1965, marchas de los trabajadores rurales, azucareros (1962, 1964 y 1965).
La crisis económica golpea fuerte a los sectores populares y éstos responden a través de una serie de medidas de lucha que llevan al enfrentamiento con las políticas gubernamentales, optando el Poder Ejecutivo por implantar las Medidas Prontas de Seguridad (octubre de 1967).
A medida que la crisis se profundizaba, que se planteaban nuevas y más continuas situaciones coyunturales, retornan dentro de la CNT las discusiones las discusiones que derivaban de distintos enfoques de apreciación de la realidad del momento: enfoques vinculados tanto a las experiencias de los distintos gremios y sindicatos como a las apreciaciones que los dirigentes de las organizaciones sindicales tenían en función de sus diferentes visiones políticas. Es así que en torno a esta problemática sobre la situación política, la metodología a seguir para mejor enfrentar las medidas gubernamentales contra los intereses de los trabajadores y de los sectores populares.